Comentarios sobre mi viaje a Agion Oros

En el verano del año 2002, tuve la oportunidad de visitar este paraíso de la cristiandad o llamado el centro espiritual de la Iglesia Ortodoxa.

Así, como relato en la descripción de Agion Oros mi puerto de partida fue la ciudad de Uranupolis (Ouranoupolis), pasé por diferentes monasterios hasta llegar a Dafni el puerto de Athos, para luego por tierra arribar a Karies la capital de la península.

Desde Karies por tierra a Vatopedi, el segundo monasterio en importancia de Agion Oros. Visité el monasterio por dos días. Compartí este tiempo con los monjes y participé en los preceptos religiosos de la iglesia ortodoxa. Visité el museo del monasterio de Vatopedi, único en su clase por tener las mayores antigüedades de la iglesia Ortodoxa.
Después de Vatopedi visité también el monasterio de Theofilos y Karakalou. Experimenté una paz enorme por el silencio, la espiritualidad y la calma que reina en toda la península.
Me llamó la atención la devoción que se profesa a la Virgen María por ser la Madre de Cristo.

El año 2003 volví a Vatopedi, viajando por la costa este de Agion Oros, ya ésta segunda vez tuve más relación con la religión ortodoxa, a través de un monje llamado Pater Mathews (norteamericano) y del Abad del monasterio Pateras ‘padre’ Arsenio.

Este mensaje tiene un (LINK en el título de este artículo) para aquellos que deseen conocer más de cerca Uranupoli, Agios Oros u otros temas. A la derecha de esta pagina se encontraran un índice con los temas a visitar.)

Monte Athos - Agion Oros

Monte Athos - Agion Oros

Al norte de Grecia existe un lugar donde el tiempo parece haberse detenido: es la península del monte Athos, la montaña sagrada que los griegos llaman Agion Oros, que se eleva a 2.500 metros de altura sobre el nivel del mar, y en torno a la cual hay 20 monasterios habitados por unos 3.000 monjes,(en griego Kaloyeros) dedicados en cuerpo y alma a la oración y al trabajo de la tierra.
Cuenta la leyenda que la Virgen María, durante un viaje en barco, se vio arrastrada hasta este lugar, y quedó tan fascinada por su belleza, que le pidió a su Hijo que se lo concediera como regalo. Desde entonces este lugar sagrado está, paradójicamente, vedado a las mujeres, quienes tan sólo pueden acercarse por mar a 500 metros en uno de los cruceros que parten desde Ouranoupoli que bordean la hermosa costa de la península.
Naturaleza

Agion Oros esta rodeada de una bellísima costa acantilada, con una hermosa vegetación y una sucesión de playas vírgenes, este lugar ha permanecido inalterable desde que en el siglo VII cuando se convirtió en refugio y meca espiritual de los eremitas y religiosos que huían de las persecuciones de los Otomanos en Palestina, Egipto y Oriente Próximo.
En un principio estaban dispersos pero, con el paso del tiempo, se agruparon en monasterios; alcanzaron su época de mayor esplendor durante el imperio bizantino, que les otorgó protección. Aunque Agion Oros forma parte de la república griega, toda la península tiene su propia autonomía; de los asuntos espirituales se ocupa un protos (elegido por los veinte priores de los monasterios), y de los asuntos temporales, un gobernador que depende del Ministerio de Asuntos Exteriores griego. Incluso, para preservar este aislamiento secular, el propio servicio de guardacostas griego patrulla por la zona para impedir que los barcos se acerquen más de 500 metros de la costa.
Única experiencia
Todo esto ha otorgado a este lugar sagrado un aura de misterio y espiritualidad que atrae periódicamente a un gran número de peregrinos ortodoxos y a uno que otro turista interesado en su magnifica arquitectura que quieren vivir una experiencia única alojándose en alguno de sus monasterios que, además de las maravillas artísticas y arquitectónicas que atesoran, están encaramados sobre impresionantes y escarpadas rocas.
Este es el caso del monasterio de ‘Vatopaidi’ que es uno de los monasterios más grandes de Athos es un verdadero milagro arquitectónico. Por supuesto, el peregrino que decida compartir por unos días la vida cotidiana con los monjes debe tener presente su austera vida, que a cambio, podrá disfrutar del silencio y la paz monacal, departir amigablemente con ellos y sentir de la espectacularidad de la ceremonia litúrgica ortodoxa.
Reglas estrictas
Quien desea visitar la ‘república de los monjes ortodoxos’ (kaloyeros) debe seguir las estrictas normas que rigen las visitas. Tan sólo se puede permanecer cuatro días y hay que previamente solicitar un permiso o ‘visa’ con suficiente tiempo de antelación en la oficina de peregrinos de Salónica; sólo se conceden diez autorizaciones por día, recordando que el peregrino (deberá ser varón). Desde Salónica - (Thessaloniki) parten autobuses hasta Ouranoupoli, que es el punto de partida del viaje a Athos (previamente hay que registrarse en su oficina de peregrinos), desde esta hermosa ciudad griega se toma un ferry que navega bordeando las costas del oeste de Agion Oros hasta el puerto de Dafni, para a continuación, poder seguir el viaje en autobús hacia la capital de Athos, Kariés, y desde ahí, iniciar la visita a los monasterios que uno esta registrado.